jueves, 20 de junio de 2013

CEREBRO FEMENINO

Numerosas investigaciones neuropsicológicas evidencian diferencias significativas entre hombres y mujeres en la organización funcional del cerebro y la actividad mental. Investigaciones relevantes replantean hoy cuestiones tradicionales sobre los condicionantes biológicos y culturales en el conocer, querer, sentir y actuar de hombres y mujeres. No cabe en la actualidad adoptar posturas simplistas y dicotómicas de oposición de sexo frente a género, entendiendo que sexo hace referencia a los aspectos biológicos de dimorfismo sexual, es decir macho frente a hembra; mientras que género agrupa los aspectos psicológicos, sociales y culturales, es decir, lo que en una determinada sociedad se considera describe y prescribe como propio y diferencial de ser hombre o mujer. Tal oposición entre biología y cultura tan vigente en la tradición no sólo es simplista, sino falsa.

Sexo genotípico, sexo fenotípico, identificación de sexo

Los aproximadamente 35.000 genes que recogen la memoria filogenética de la especie humana se agrupan en 23 pares de cromosomas. El par 23, cuando es XX, determina el sexo de mujer, y cuando es XY de varón. El cromosoma Y es el más pequeño, con 60 genes, mientras los otros cromosomas tienen miles. Un gen del cromosoma Y, el gen Sry, activa en la sexta semana de vida intrauterina el desarrollo de los testículos, que a su vez producirán hormonas andrógenos, la testosterona, que se distribuye por todo el embrión estableciendo las pautas de estructuración corporal propias del varón. La testosterona es responsable de la masculinización del cuerpo humano en los diversos sistemas, músculo-esquelético, cardiovascular, y nervioso, particularmente el cerebro. La acción de estas hormonas sexuales en el cuerpo y particularmente en cerebro conforman redes neuronales y procesos bioquímicos diferentes en hombres y mujeres, ya desde los primeros meses de vida intrauterina posibilitando así aspectos diferenciales  en el comportamiento humano desde el comportamiento sexual hasta los procesos cognitivos lingüísticos y emocionales.


Cuando el par de cromosomas es XX, la segunda X envía instrucciones para fabricar ovarios, que producirán los estrógenos, que a su vez conformarán la estructuración corporal propia de la mujer. La feminización del cuerpo de mujer afecta todos los sistemas, desde el sexual reproductor, hasta el nervioso central. De modo que si no está presente el cromosoma Y, no se forman los órganos genitales masculinos y lo que se desarrollan son los genitales propios de la mujer. Podemos afirmar que genéticamente Adán nace de la costilla de Eva.

La investigación disponible explica la serie continua de la sexualidad humana, desde diferencias en la estructura funcional cerebral. Estos dimorfismos encefálicos dependen de la influencia en la fase temprana de hormonas que actúan sobre los núcleos encefálicos que median diferentes aspectos de la conducta sexual. Los niveles elevados de andrógenos en los cerebros de mujeres genotípicas llevan a un cerebro más masculinizado. Dentro de los universales cognitivos, lingüísticos y emocionales que comparten todos los miembros de la especie humana, las mujeres  presentan  una organización funcional del cerebro, y por tanto en sus capacidades mentales.  La mente humana es resultado de un largo proceso filogenético, en el que han ido apareciendo sucesivas estructuras cerebrales para enfrentarse a problemas distintos, adaptarse, sobrevivir y dejar descendencia. Además de lo anterior expertos en  las ciencias sociales ha impuesto como académicamente correcto, y también políticamente, la consideración de que las diferencias entre los seres humanos, son debidas predominantemente al medio sociocultural, los aprendizajes y socialización.





Como tendencia general, las mujeres superan a los hombres en las pruebas de velocidad perceptiva, cuando hay que identificar rápidamente objetos concordantes. También en pruebas de fluidez en la ideación, por ejemplo enumerar objetos que sean del mismo color; y en pruebas de fluidez verbal, en las que se han de encontrar palabras que empiecen con la misma letra. Se comportan con más éxito en tareas manuales de precisión, que requieren una coordinación motriz fina. Realizan mejor que los hombres las pruebas de cálculo matemático vocabulario y razonamiento.

Estas diferencias en las capacidades mentales por razón de sexo no sólo aparecen después de la adolescencia. Ya están presentes desde edades tempranas como han mostrado diferentes estudios transversales y longitudinales desde los primeros años de vida. Los efectos de la exposición a las hormonas sexuales son distintos según el momento de la vida en que se producen. Cuando la edad es más temprana, periodo uterino, los efectos son más duraderos, al modificar la organización cerebral de forma más permanente. Son más organizativos y estructurales al aplicarse en periodos más sensibles. Las mismas hormonas aplicadas en etapas posteriores de la vida causarán efectos menores.

Niñas que fueron expuestas en etapa prenatal a dosis altas de andrógenos evidenciaron en su desarrollo tales diferencias en la línea que venimos señalando respecto a orientación espacial, resolución de problemas espaciales, reconocimiento de patrones, velocidad perceptiva, razonamiento matemático, fluidez verbal.

Otra vía para estudiar el cerebro femenino es a partir de las funciones mentales alteradas como consecuencia de lesiones cerebrales acotadas. En primer lugar respecto a la misma asimetría y lateralización cerebral. Sabemos que el cerebro humano está asimétricamente organizado de modo que el hemisferio izquierdo procesa la información y controla la motricidad de la parte derecha del cuerpo, mientras que el hemisferio derecho controla la parte izquierda del cuerpo. El hemisferio izquierdo es responsable del lenguaje en el 98% de la población que es diestra, mientras que en el hemisferio derecho tienden a radicar funciones de carácter viso-espacial y razonamiento matemático. El cuerpo calloso está formado por el conjunto de fibras neurales que comunican entre sí los dos hemisferios.






Diferentes estudios han constatado menor asimetría en mujeres que en hombres, lo que explicaría el hecho de que las lesiones cerebrales en mujeres suelen tener menos secuelas, por la capacidad de otras áreas neurales para hacerse cargo de funciones lesionadas. Cabe resaltar las diferencias registradas en las regiones del sistema límbico. Las mujeres la activación es mayor en el área tálamo-cinglar.

En el comportamiento emocional, las mujeres prefieren la mediación simbólica, la verbalización y la expresión oral para la resolución de conflictos.

Aportaciones desde otras disciplinas como la paleontología y la psicología evolucionista proporcionan claves para determinar la evolución del cerebro femenino. Este  proceso evolutivo que recogió, por selección natural, aquellas ventajas adaptativas para la supervivencia de la especie. El cerebro humano es el resultado de millones de años de evolución, hasta las últimas conquistas de nuestra especie, el lenguaje, hace unos ciento cincuenta mil años.


A lo largo de miles de años de nuestra historia filo-genética, el hombre vivía en grupos limitados de cazadores-recolectores con división del trabajo entre los sexos. Los varones se encargarían de la caza mayor, que exigía recorrer largas distancias, orientarse en los desplazamientos, representar mapas mentales del territorio, desarrollar rapidez en el lanzamiento de proyectiles, etc. También eran responsables de la defensa del grupo contra depredadores y enemigos. Las mujeres recolectarían alimentos, atenderían el hogar, preparando comida, vestimenta y especialmente volcadas a la atención y cuidado de los hijos. Las mujeres presentarían orientación en espacios propios, amplitud de memoria para los detalles, capacidades  motrices finas y una especial discriminación para los pequeños cambios en el entorno, muy especialmente en el aspecto y comportamiento de los hijos sus necesidades y demandas, sus estados emocionales.




DIFERENCIAS POR SEXO EN LA ANATOMÍA DEL CEREBRO


CEREBRO FEMENINO
CEREBRO MASCULINO
Áreas de lenguaje más grandes
Áreas frontales mediales más grandes
Áreas paralímbicas mediales más grandes
Áreas singulares más grandes
Áreas frontales laterales más grandes
Amígdala e hipotálamo más grande
Mayor cantidad relativa de sustancia gris (Materia gris es un tipo de tejido necesario para procesar información)
Mayor volumen global de sustancia blanca (Materia blanca es el tejido necesario para la transferencia de información a través de regiones distantes)
Neuronas más densamente agrupadas en el lóbulo temporal
Ventrículos cerebrales más grandes

Más neuronas globalmente


La estructura del cerebro masculino y femenino es inherente diferente, lo que explica la diferente aptitud de género para ciertas habilidades.


LAS DIFERENCIAS SEXUALES NE LA CONDUCTA COGNITIVA

Tirar al blanco y atrapar
Hombres  >    Mujeres
Habilidades motoras finas 
Mujeres   <    Hombres 
Rotación mental
Hombres  >   Mujeres
Navegación espacial
Hombres  >   Mujeres
Conocimiento geográfico
Hombres  >   Mujeres
Memoria espacial
Mujeres   >   Mujeres
Cálculo
Mujeres   >   Hombres
Razonamiento matemático
Hombres  >   Mujeres
Sensibilidad a los estímulos sensoriales
Mujeres   >    Hombres
Velocidad perspectiva
Mujeres   >   Hombres
Sensibilidad a la expresión facial y corporal
Mujeres   >   Hombres
Memoria de reconocimiento visual
Mujeres   >   Hombres
Fluidez verbal
Mujeres   >   Hombres
Memoria verbal
Mujeres   >   Hombres



LAS DIFERENCIAS DE LA COMUNICACIÓ ACERCA DEL MARKETING

En los centros comerciales las tiendas para los hombres están situadas casi siempre cerca de la entrada, mientras que las mujeres tienen que atravesar un laberinto de perfumes y cosméticos, pasar por los zapatos, los bolsos.


¿Puede una mujer llegar a su destino sin comprar nada en el camino?

Mientras que a las mujeres les gusta la búsqueda a los hombres les gusta llegar al blanco. La mayoría de los hombres encuentra fastidioso al tener que maniobrar por todo el centro comercial. Las tiendas atraen a los hombres con una entrada fácil y una salida rápida mientras que a las mujeres hay que ofrecer una compleja experiencia sensorial.

Las estrategias de marketing suelen diseñarse para avivar la imaginación de los hombres; sin embrago en el nuevo milenio los mercadólogos y los publicistas necesitan conocer un poco mejor la mentalidad de la mujer.

Aunque los hombres tengan más células cerebrales que las mujeres, las mujeres tienen más conexiones dendríticas entre las neuronas. Esto podría explicar por qué las mujeres utilizan tantos sentidos y ven un panorama más amplio cuando toman una decisión de compra (cualquier otra decisión).

A partir de lo que ven (el empaque), lo que escuchan (música de fondo de una tienda) y lo que sienten (una conexión emocional con un mensaje publicitario). Las células femeninas se conectan y comparten información en todos lo niveles.

El cerebro femenino tiene más tejido conector corpus collusum, lo cual significa que las mujeres pueden transferir más rápidamente datos entre los hemisferios derecho e izquierdo. Quizá sea el hecho de que hay más espacio en el cual las ondas cerebrales, que toman decisiones se pueden mezclar e interactuar, lo que les facilita a las mujeres copilar diversos datos.

Las mujeres tienen mayor acceso a ambos lados del cerebro, por lo tanto son pensadoras más integrales. Además las mujeres tienen un sistema límbico más grande, lo cual significa que están más en contacto con sus sentimientos y por consiguiente suelen poderlos expresar mejor que los hombres.

Las investigaciones demuestran que las mujeres perciben productos de una marca de una manera más integral que los hombres, lo cual refleja la rápida conexión que establecen entre sus lóbulos derecho e izquierdo.

Las mujeres detectan con rapidez los mensajes incoherentes. Cuando se expone una incoherencia, no solo está en el riesgo de perder una clienta, también existe el peligro de que la clienta decepcionada comparta su perspectiva negativa con su red de amigas.

DIFERENCIAS EN LA TOLERANCIA DEL RIESGO

Las mujeres están dispuestas a arriesgarse pero son menos propensas buscar situaciones arriesgadas solo por el placer de vivir peligrosamente. Su combinación química de estrógeno, progesterona y niveles más altos de oxitocina y serotonina tienen un efecto calmante que la lleva a pensar cuando enfrenta retos en lugar de tomar acción.
 


BIBLIOGRAFIA: 
- Petra gucikova EL CEREBRO FEMENINO Universidad de Manizales. http://www.slideshare.net/petragucci/el-cerebro-masculino-y-el-cerebro-femenino
- Snell Neuro Anatomía clínica 5ta edición 
- Louann brizendine El cerebro femenino 


INTEGRANTES: Yeison Lopez
  Deisy Narvaez
Angie Alvarez

miércoles, 12 de junio de 2013


El sistema límbico. 





El cerebro humano está formado por varias zonas diferentes que evolucionaron en distintas épocas. Cuando en el cerebro de nuestros antepasados crecía una nueva zona, generalmente la naturaleza no desechaba las antiguas; en vez de ello, las retenía, formándose la sección más reciente encima de ellas.

Esas primitivas partes del cerebro humano siguen operando en concordancia con un estereotipado e instintivo conjunto de programas que proceden tanto de los mamíferos que habitaban en el suelo del bosque como, más atrás aún en el tiempo, de los toscos reptiles que dieron origen a los mamíferos.

La parte más primitiva de nuestro cerebro, el llamado 'cerebro reptil', se encarga de los instintos básicos de la supervivencia -el deseo sexual, la búsqueda de comida y las respuestas agresivas tipo 'pelea-o-huye'.
En los reptiles, las respuestas al objeto sexual, a la comida o al predador peligroso eran automáticas y programadas; la corteza cerebral, con sus circuitos para sopesar opciones y seleccionar una línea de acción, obviamente no existe en estos animales.
Sin embargo, muchos experimentos han demostrado que gran parte del comportamiento humano se origina en zonas profundamente enterradas del cerebro, las mismas que en un tiempo dirigieron los actos vitales de nuestros antepasados.
'Aun tenemos en nuestras cabezas estructuras cerebrales muy parecidas a las del caballo y el cocodrilo', dice el neurofisiólogo Paul MacLean, del Instituto Nacional de Salud Mental de los EE.UU.

Nuestro cerebro primitivo de reptil, que se remonta a más de doscientos millones de años de evolución, nos guste o no nos guste reconocerlo, aún dirige parte de nuestros mecanismos para cortejar, casarse, buscar hogar y seleccionar dirigentes. Es responsable de muchos de nuestros ritos y costumbres (y es mejor que no derramemos lágrimas de cocodrilo por esto).



 

El sistema límbico está compuesto por un conjunto de estructuras cuya función está relacionada con las respuestas emocionales, el aprendizaje y la memoria. Nuestra personalidad, nuestros recuerdos y en definitiva el hecho de ser como somos, depende en gran medida del sistema límbico.


Los componentes de este sistema son: amígdala, tálamo, hipotálamo, hipófisis, hipocampo, el área setal (compuesta por el fórnix, cuerpo calloso y fibras de asociación), la corteza orbitofrontal y la circunvolución del cíngulo.


CORTEZA CEREBRAL, SISTEMA LIMBICO Y COMPORTAMIENTO SEXUAL.






Numerosos experimentos llevados a cabo con animales de experimentación vienen poniendo de relieve la importancia de la corteza cerebral en la sexualidad.
La conclusión más importante de estos estudios en los que se ha intentado explorar las relaciones entre la corteza cerebral y el comportamiento sexual, es que precisamente en esta zona del cerebro es donde se realizan las funciones que están más en relación con los estímulos psíquicos y ambientales
.
La corteza cerebral, según estas teorías sería una de las principales zonas anatómicas responsables de las repercusiones que los estímulos sensoriales y psíquicos tienen sobre la actividad sexual del hombre.

La corteza está íntimamente conectada con el hipotálamo, a través del cual se relaciona con la hipófisis, con la médula espinal, con otras estructuras nerviosas, con las glándulas endocrinas y con el aparato genital, también se relacionan muy directamente con el sistema límbico; de este modo la corteza recibe y elabora la información que le llega, y a su vez remite órdenes e información al resto de las estructuras nerviosas, influyendo notablemente en muchos aspectos de la respuesta sexual.


Estas conexiones son en alguna medida las que explican la gran influencia de diversos factores psíquicos en la respuesta sexual, por lo que la corteza es una de las zonas cerebrales más directamente implicadas en los trastornos de la sexualidad de origen psicosomático.
Cuando la persona se encuentra en condiciones óptimas desde el punto de vista psicológico, ambiental, general, se encuentra relajada, despreocupada, sin conflictos en la esfera de la sexualidad, es más probable que la actividad sexual sea satisfactoria. Por el contrario, algunos factores como la ansiedad, el miedo, preocupaciones, estrés, ciertos sentimientos y emociones, la depresión, se elabora a través de la corteza cerebral y pueden ocasionar graves disfunciones sexuales.



CEREBRO INTERNO  (SISTEMA LIMBICO -hipocampo amígdala, septum, giro cingulado-, HIPOTÁLAMO,  NÚCLEO ESTRIADO)   Y SEXUALIDAD


Dentro de lo que es el cerebro interno, es decir de las zonas cerebrales que se suceden al profundizar en el cerebro tras la corteza, existen diversas formaciones neurológicas implicadas en la sexualidad, las más relevantes según los conocimientos actuales serán el sistema límbico, el hipotálamo y el núcleo estriado. 



El sistema límbico no es propiamente una estructura del cerebro interno, sino más bien un conjunto de estructuras nerviosas que se hallan rodeando el tronco cerebral, como si se tratara de un anillo, y fundamentalmente está compuesto por cinco grandes estructuras que se denominan: hipocampo, amígdala, septum, giro cingulado y campos de proyección olfatoria.



Se trata de un sistema extraordinariamente complicado, tanto en lo que se refiere a los vínculos que mantiene entre sus diversas estructuras internas como respecto de las conexiones que estas tienen con otras formaciones externas al sistema límbico, ya que están íntimamente ligadas a la corteza cerebral, al tálamo y al sistema reticular.
Las implicaciones de estos sistemas en la sexualidad no se han aclarado definitivamente, y tan sólo se conocen algunas relaciones puestas de manifiesto en diversos trabajos experimentales.

La amígdala parece jugar un papel central en la conducta sexual, habiéndose comprobado que la estimulación del septo y del área pre óptica media daban lugar a una erección total en animales de experimentación. El papel de la amígdala como centro de procesamiento de las emociones es hoy incuestionable. Pacientes con la amígdala lesionada, no son capaces de reconocer la expresión de un rostro o si una persona está contenta o triste. En un experimento en el cual a  los monos a las que fue extirpada la amígdala manifestaron un comportamiento social en extremo alterado: perdieron la sensibilidad para las complejas reglas de comportamiento social en su manada. El comportamiento maternal y las reacciones afectivas frente a los otros animales se vieron claramente perjudicados.


Otra formación de gran importancia dentro del sistema límbico es el hipocampo, ya que se cree que ejerce una influencia moduladora de la tumescencia genital, regulando por tanto la afluencia de volumen sanguíneo al aparato genital, lo cual es hasta la actualidad el índice más fiable para medir la excitación y la respuesta sexual.

El sistema límbico está estrechamente vinculado con otra zona del cerebro interno que, a su vez, parece estar amplia mente relacionada con la sexualidad, se trata del hipotálamo, que también está implicado en la esfera de los instintos, incluso se ha descrito un área del placer.

El hipotálamo está relacionado con varias estructuras nerviosas, recibe vías neurológicas de comunicación, del sistema límbico y del tálamo y de él parten vías de comunicación hasta el tálamo, la médula y la hipófisis; también está conectado con la corteza cerebral, y asimismo se relaciona con el sistema nervioso autónomo, dando lugar a través de éste  la gran mayoría de las transformaciones fisiológicas propias de la respuesta sexual normal.

Además el hipotálamo influye sobre las glándulas endocrinas, y por tanto sobre la producción y mantenimiento en el torrente circulatorio de la mayor parte de las hormonas sexuales.


El hipotálamo está implicado en los centros del placer, llamados así por lo estimulante que resulta para los animales de experimentación la estimulación de esta área, hasta el punto de que prefieren dicha estimulación experimental a su comida favorita.
La estimulación de estas áreas también se ha realizado en seres humanos, con resultados variables. Algunos hombres apreciaron tras el experimento una cierta sensación de bienestar poco definida, en otros casos dio lugar a estados de auténtica euforia.

Para algunos autores los puntos del cerebro superior que al ser estimulados dan lugar a un aumento del tamaño del clítoris similar al de la excitación sexual de la hembra (tumescencia clitoridiana), serían los mismos que en el macho causan la erección del pene, tal como parece haberse demostrado en experiencias con animales.

Excitación Sexual

La excitación sexual, tanto en el hombre como en la mujer, consta de varias fases sucesivas. Tras una fase previa de deseo sexual, surge la fase de excitación, a la que continúa la de meseta, hasta llegar a la orgásmica, y por último la fase de resolución.

El proceso comienza a partir de una fase previa o de deseo en la que se van acumulando estímulos psicológicos en relación con elementos eróticos, y con la estimulación fisiológica producida por el contacto corporal (besos, caricias), que contribuyen a la excitación sexual, especialmente si estas se realizan en algunas zonas llamadas erógenas del cuerpo que cada persona encontrará de acuerdo al conocimiento de su propio cuerpo y al de su pareja. 




Como vemos, la estimulación sexual, la erección y las respuestas varían mucho de una persona a otra y depende entre otras de los variados y complejos mecanismos neurofisiológicos, psicológicos, y ambientales, además de las repuestas hormonales, de los órganos de los sentidos que de una u otra manera intervienen en la respuesta sexual humana, el desenvolvimiento sexual de una persona. 



MECANISMOS CEREBRALES QUE REGULAN LA SEXUALIDAD

Desde hace varios años se realizan diferentes investigaciones relacionadas con la conducta sexual humana, con el inicio del deseo, con la respuesta sexual, con la neurofisiología de la erección y con otras variadas patologías que intervienen en el éxito o no de una experiencia sexual.


Sexualidad e Investigación con Animales de Experimentación 

Gracias a los experimentos que se han llevado acabo con diversos animales, se ha logrado un notable progreso del conocimiento a nivel neuroanatómico de la sexualidad.
Los animales seleccionados en este tipo de experimentación han sido aquellos con un sistema nervioso más similar al del hombre, como es el caso de los monos ardilla, y otros primates como los macacos, los gatos, conejos, ratas, toros, etc.
Se ha comprobado que al estimular diversos puntos del cerebro se puede producir una excitación sexual que se mide en forma de diversos grados, valorando las transformaciones fisiológicas que se ocasionan en el aparato genital del animal denominados grados de tumescencia, lo que se relaciona con la afluencia de volumen sanguíneo hacia los órganos genitales, principal característica medible de la excitación sexual en el animal.
De este modo se ha visto que estimulando diversas zonas del cerebro, se puede producir no una mera situación de excitación sexual en el animal, sino la plena eyaculación en el macho.




El síndrome de Kluber-Bucy: aparece tras la extirpación del núcleo amigdalino en monos salvajes. Estos se tornan mansos, educables e ingieren como alimentos, objetos comestibles y no comestibles. Además desarrollan una hipersexualidad insólita. Parece que la extirpación de los núcleos amigdalinos y de las estructuras vecinas a estos hiciese desaparecer una función inhibitoria sobre las zonas cerebrales que regulan la actividad sexual.

La experimentación con animales ha servido para descubrir y comprender mejor de qué modo interviene el cerebro en aspectos neurofisiológicos de la sexualidad, aunque sea de un modo parcial. De todos modos ha aportado datos de gran interés para vislumbrar las implicaciones de la corteza cerebral y otras estructuras nerviosas, entre ellas el sistema límbico, el hipocampo y el núcleo estriado.


·      




sábado, 8 de junio de 2013

CEREBRO MASCULINO


 CEREBRO MASCULINO 




DESARROLLO DEL CEREBRO MASCULINO: 

Las diferencias entre el hombre y la mujer se empiezan a notar desde el desarrollo embrionario , puesto que el cerebro del feto es unisex hasta la octava semana del desarrollo. la vida de todo ser humano comienza como hembra , pero seis semanas después de la concepción esto cambia,  todo gracias a un gen alojado en el cromosoma Y , y la presencia de una hormona llamada TESTOSTERONA (hormona de la agresividad y el deseo sexual en los hombres) 

ESPECIFICIDAD DEL CEREBRO MASCULINO 

El cerebro masculino es alrededor de un 9% mas grande que el femenino . Este hecho  indica que aunque los hombres y mujeres tienen el mismo numero de células cerebrales , las de las mujeres están empaquetadas de forma mas apretada en el cráneo.


Actualmente está bien establecido que el cerebro es la base de la mente y que entre los dos hemisferios que lo forman existen diferencias anatómicas y funcionales. Asimismo, es bien conocida la influencia de las diferencias sexuales, estas diferencias cognitivas se pueden explicar mediante algunas hipótesis:


ASIMETRIA CEREBRAL Y EL SEXO:



Se ha señalado que las mujeres son mejores en aptitudes que requieren el uso de estrategias lingüísticas y los hombres en las que necesitan la utilización de estrategias espaciales. en la mujer existe un predominio funcional del hemisferio izquierdo, que está especializado en el lenguaje y procesamiento de la información en detalles imaginativos. En contraste, posee muy poco sentido pictórico, geométrico y espacial, capacidades que corresponden al hemisferio derecho, que es el predominante en hombres.

Los hombres y los niños sobresalen en la capacidad de hacer girar mentalmente los objetos, en el reconocimiento de formas, en la distinción izquierda-derecha así como en la representación en dos dimensiones de objetos que tienen tres; además, los hombres son mejores en el cierre perceptual y en el desdoblamiento de formas visuales en conjuntos completos. En las diferencias en las capacidades lingüísticas las niñas hablan antes, su fluidez y su articulación verbal son mejores y aprenden a leer y a escribir más fácilmente; a partir de la adolescencia estas diferencias entre sexos tienden a disminuir. Junto a una mayor capacidad lingüística, las mujeres sobresalen en la velocidad perceptual y en la memoria visual.

las capacidades lingüísticas y espaciales son más asimétricas en el hombre, dependiendo el lenguaje del hemisferio izquierdo y el reconocimiento espacial del derecho. En las mujeres ambas capacidades están distribuidas más simétricamente entre ambos hemisferios, se sabe también que la percepción de formas en el hombre proviene del hemisferio derecho ya que presenta mayor habilidad en la mano izquierda , mientras que en la mujer es bihemisférica.
En general, las mujeres están más protegidas contra las diversas lesiones neurológicas, ya que el hemisferio derecho está menos especializado en algunas funciones y tiene mayor plasticidad.

ORGANIZACIÓN CEREBRAL DIFERENTE: 


las diferencias sexuales en el cerebro de los mamífero  se han observado principalmente en tres estructuras: el hipotálamo, la comisura anterior y el cuerpo calloso ; en el hipotálamo los núcleos del área preóptica  es dos veces mayor y contiene aproximadamente el doble número de células en seres humanos varones jóvenes que en mujeres, tambien en el area premamilar que se relaciona con la defensa territorial se observa mayor actividad y tamaño ; En cuanto al cuerpo calloso actualmente varios autores describen que en relación con el tamaño cerebral los hombres tienen un cuerpo calloso mayor.

FACTORES ENDOCRINOS:

Las hormonas son necesarias para el desarrollo adecuado de diferentes estructuras cerebrales, el cerebro de los hombres se organiza según líneas diferentes del cerebro de las mujeres desde una edad muy temprana. Las hormonas sexuales dirigen esta diferenciación durante el desarrollo , en relación a este tema las pautas cognitivas pueden seguir siendo sensibles a las fluctuaciones hormonales a lo largo de toda la vida; se demostró  que el rendimiento de las mujeres en determinadas tareas cambiaba a lo largo del ciclo menstrual; los niveles altos de hormonas correspondían a una relativa disminución en la capacidad espacial.

MEDIO AMBIENTE SOCIAL:
·      
Los factores socio-culturales y la alfabetización pueden afectar a las estrategias cognitivas para resolver problemas y situaciones (modo cognoscitivo), pero no modifican realmente la organización hemisférica. Si las diferencias sexuales en la cognición se debieran únicamente a lo socio-cultura, éstas deberían ser más acusadas con el tiempo, lo que no es así.
 MODELO GENÉTICO: 
· 
El factor genético es el más importante para determinar variaciones en la habilidad espacial. Se postula que un gen recesivo localizado en el cromosoma X favorece el desarrollo de habilidades espaciales. En el varón es suficiente la presencia de un gen para producir el efecto, en la mujer es preciso que existan dos genes. Si un gen es recesivo para un determinado rasgo, éste no se expresará en una mujer a menos que el gen esté presente en los dos cromosomas X. En el varón es suficiente su presencia en un solo cromosoma X, es decir, los hombres tienen mayor probabilidad de expresar este rasgo y sólo un 24% de las mujeres supera las habilidades espaciales medias de un hombre.


 VELOCIDAD DE MADURACIÓN: 

Los adolescentes que maduran más tempranamente rinden mejor en tests verbales que en tests de habilidades espaciales; los que maduran más tardíamente se comportan de modo opuesto.  Se sabe también que las mujeres maduran física y cerebralmente más rápidamente que los hombres y es posible que la tasa de maduración determine, en parte, la menor asimetría cerebral.

DIFORMISMO SEXUAL CEREBRAL



Los hombres realizan mejor que las mujeres las tareas viso-espaciales, y las mujeres llevan a cabo las tareas verba- les mejor que los hombres. Los varones superan a las niñas en la capacidad de razonamiento matemático avanzado.
Las mujeres presentan menos lateralidad para determinadas funciones y padecen con menor frecuencia trastornos del desarrollo asociados con el hemisferio izquierdo, como por ejemplo, los trastornos del lenguaje.  Se ha visto que tras lesiones del hemisferio izquierdo en la infancia, las funciones relacionadas con el lenguaje parecen transferirse al hemisferio derecho más rápido en las niñas que en los varones. De hecho, la dislexia y los trastornos en el aprendizaje de la lectura son mucho más frecuentes en varones.
En los hombres, en cambio, la función cerebral parece estar más lateralizada. Hay evidencias de que las mujeres utilizan tanto el giro frontal anterior izquierdo como el derecho en el proceso de fonación, mientras que los hombres sólo utilizan el izquierdo. Esto explicaría que las mujeres superen a los hombres en fluidez verbal y velocidad de lectura.  Los hombres, en cambio, son superiores en el razonamiento, la captación de las relaciones espaciales y en las habilidades motoras dirigidas a un objetivo, destrezas que corresponden al hemisferio derecho.
Se han encontrado diferencias sexuales en la expresión de casi todas las enfermedades psiquiátricas, por ejemplo, los trastornos depresivos son dos veces más frecuentes en la mujer; sin embargo los bipolares tienen tasas similares en ambos géneros.
La identidad sexual está guiada fundamentalmente por las hormonas sexuales generadas en el organismo en formación mediante la expresión de los genes específicos de la feminidad o masculinidad.
El caso de malformaciones durante el desarrollo gonadal, el sexo viene determinado por los genes de la feminidad o masculinidad que ponen en marcha la producción diferencial de las hormonas sexuales a las dosis que corresponden a cada sexo.
De esta forma se confirma el papel hormonal en la sexualización del cerebro. En el interior de las neuronas se realizan transformaciones de unas hormonas en otras, dirigidas por enzimas específicos; los genes que codifican estas enzimas son propios del sexo, y su expresión está también regulada en el espacio cerebral y en el tiempo.
En la elaboración de cada cerebro, masculino o femenino, confluyen diversos factores que informan, amplifican la información genética y la retroalimentan, especialmente en tres momentos de la vida.
En la etapa prenatal se genera la estructura general dimórfica. El dimorfismo sexual se inicia, en el sentido masculino o femenino, según la dotación genética. En las primeras dieciocho semanas del desarrollo embrionario ocurre la mayor parte de la construcción de los circuitos neuronales específicos de cada sexo, dirigido por la regulación de los genes y los efectos de las hormonas sobre las áreas cerebrales.
En los primeros años de vida se produce un “baño” del cerebro en hormonas sexuales. En la llamada pubertad infantil, a la temprana edad de un par de años, las gónadas fabrican una gran concentración de hormonas; en los chicos este periodo dura unos nueve meses los chicos se vuelven menos comunicativos y tienden a dar órdenes, competir, a apoyarse en la fuerza física, y a concentrarse, por ejemplo en un juguete, en un ordenador, etc. Su cerebro, inundado por la testosterona, se hace menos sensible a las emociones y a la relación social. Parece, por tanto, que no sea del todo cierto que las diferencias sexuales provengan principalmente de que los padres, y el entorno, les eduquen como chicos
En la pubertad se producen grandes cambios hormonales que reafirman el cableado cerebral lineal en el varón, lo que implica a q el hombre está mas dominado por la necesidad de relacionarse con mujeres y abandona sus hábitos antiguos como jugar con sus juguetes, hablar con sus amigos, esto es producto de que   en su cerebro la testosterona que dominaba en su primer año de vida volvió a activarse controlando así sus emociones e impulsos
El cerebro del hombre consta de dos hemisferios cada uno con características diferentes como:
- El operador abstracto se requiere para formar conceptos generales a partir de percepciones concretas y está configurado en toda la corteza;
especialmente de la asociativa, dada sea función generalizadora.
- El operador holístico permite ver el mundo como un todo, conecta con la corteza parietal del hemisferio derecho.
- El operador existencial que da el sentido de los que el cerebro muestra como real en las estructuras del sistema límbico.
- Un operados de valores emocionales asigna un valor emotivo a lo se percibe desde el mismo sistema limbico.
- El operador reduccionista permite a la mente ver el todo dividido en sus partes, se sitúa en el hemisferio izquierdo.
- Un operador cuantitativo que permite abstraer la cantidad de la percepción de varios elementos; aporta una innata cualidad del hemisferio izquierdo.
-El operador causal que interpreta la realidad como una secuencia de causas y efectos, procesa secuencialmente en el hemisferio izquierdo
-El operador binario reduce todo a pares de conceptos opuestos, en la región inferior del lóbulo parietal izquierdo.
Existe un gen (presente en el cromosoma X y en el Y humanos) que codifica una proteína de adhesión celular que dirige la lateralización cerebral durante el desarrollo embrionario con expresión regulada por un promotor diferente en varones y en mujeres ya que responde a hormonas sexuales que aparecen en distinto momento en el desarrollo del varón que en el de mujer. Y por ello difiere la estructura funcional en lo que se refiere al uso de los dos hemisferios.

La conducta sexual y el circuito neural di mórfico

Los circuitos cerebrales asociados con conductas sexuales exhiben diferencias estructurales que se correlacionan con el sexo, la preferencia sexual, o la identidad de género. Se ha encontrado que el dimorfismo sexual en estos circuitos resulta importante hasta la pubertad, esto implica que factores postnatales, como la producción de hormonas gonadales y factores psicosociales, juegan un rol importante en el establecimiento de la naturaleza di mórfica en circuitos neurales que median conductas sexuales.

Sistema vomeronasal se especializa en reconocer señales olfatorias específicas para cada especie, es decir, las feromonas, las cuales son producidas por uno de los sexos (macho o hembra) y percibidas por el otro.

Conducta parental

La conducta parental constituye otro ejemplo de dimorfismo sexual y claramente encontramos que las hembras y los machos de distintas especies muestran conductas diferentes ante el nacimiento de su progenie. La mayor parte de la investigación sobre la fisiología de la conducta parental se ha centrado en la conducta maternal. Las hormonas que se han relacionado con la conducta maternal son la progesterona, el estradiol y la prolactina.
El aumento de la prolactina en el cerebro masculino se da como respuesta de la conducta protectora tipica paternal , se cree que estos cambios son dados por sustancias químicas producida del sudor y la piel de las embarazas que se transmitan por el aire a las fosas nasales de sus maridos induciendoles las nuevas conexiones cerebrales. 

En el momento del nacimiento se da un pico de dopamina y oxitocina, las misma hormonas que los seres humanos producen en el momento del enamoramiento, lo que hace que la relación  de los padres 


1.    VIDEO:  El cerebro masculino



¿Cuántas veces ha sentido una mujer que su pareja masculina no sabe comprender sus sentimientos? La explicación vendría dada por una diferencia en la manera de utilizar determinadas regiones del cerebro a la hora de abordar los problemas de la vida. Los hombres pasan antes a la resolución, saltándose la etapa de análisis de los sentimientos del otro. Estas y otras conductas separan a hombres y mujeres por diferencias cerebrales y hormonales. La neurobióloga Louann Brizendine nos descubre hoy en Redes las etapas en la vida del cerebro masculino y su relación con el otro sexo; un camino plagado de altibajos hormonales que marcan la vida personal de todo hombre y su entorno.




DIFERENCIAS GENERALES

El hombre y la mujer desde el principio de la historia han tenido sus diferencias, pues hombres y mujeres  han evolucionado diferentemente en sus capacidades físicas como cerebrales. Estos dos individuos presentan características tanto fisiológicas como psicológicas, una de las cosas en las que coinciden es que  las terminaciones nerviosas situadas en el útero y el efecto de las hormonas, determinan nuestra manera de pensar y de comportarnos, pero también podemos hallar diferencias no solo entre el mismo hombre, sino entre el hombre y el animal como, el cerebro humano es tres veces más grande que el del gorila y un tercio más grande que el del hombre Neandertal.
El primer estudio que se realizó sobre el hombre y su comportamiento lo hizo Francia Gatton en 1882 quien descubrió que los hombres son más sensibles a los sonidos claros, ruidos, y menos sensibles al dolor que las mujeres. De allí para adelante diferentes estudios muestran nuevos hallazgos no solo a nivel científico, también a nivel comportamental o psicológico; algunos de ellos son.

·         Los estudios demuestran que el hemisferio izquierdo de las chicas se desarrolla más rápidamente que el de los chicos; esto significa que las chicas hablarán antes y mejor que su hermano

·         Se calcula que entre el 80% y el 85% de los hombres tienen el cerebro configurado de manera masculina y que entre el 15% y 20% lo tienen en mayor o menor grado femenino. Muchos de los hombres de este segundo grupo serán homosexuales

·         A los chicos les gusta las cosas, y a las chicas la gente Los niños quieren poder y posición social; las niñas desean relaciones y cooperación.

·         En los hombres la emoción suele localizarse en el hemisferio derecho, lo que significa que la emoción puede operar independientemente de otras funciones cerebrales.  En las mujeres la emoción trabaja sobre una región más amplia en los dos hemisferios y entra en acción con otras funciones cerebrales simultáneamente

·         Nunca dé un consejo a un hombre a menos que se lo pida. Dígale que confía en su capacidad para resolver el problema. El cerebro del hombre es una máquina para resolver problemas

·         ¿Por qué los hombres estresados no hablan? R/ La mujer piensa en voz alta; el hombre habla para sus adentros ante situaciones problemáticas o estresantes; utilizan su hemisferio derecho para intentar resolver sus problemas y buscar soluciones, y dejan de utilizar su hemisferio izquierdo para escuchar o hablar.

·         Los hombres de verdad lloran, pero solo cuando se estimula la región cerebral que controla las emociones, situada en el hemisferio derecho

·         Las hormonas programan nuestro cerebro desde antes de nacer, dictando así nuestros pensamientos y comportamientos

·         El cerebro masculino está predominantemente estructurado para entender y construir sistemas; el femenino para la empatía

·         El trastorno de la conducta antisocial: Un número reducido de nuños acaba en centros psiquiátricos infantiles cuando se les diagnostica “trastornos de conducta” que son niños difíciles de controlar

·         El trastorno de la personalidad psicópata: Los psicópatas suelen ser hombres con un nivel muy bajo del componente afectivo de la empatía.

·         La imitación y la práctica: Los juegos de los niños más mayores suelen representar roles del padre del mismo sexo.

·         Las hormonas sexuales tienen un efecto activador prenatal en el cerebro.